lunes, 15 de diciembre de 2014

Mantecados de mandarina, avellana y café


 















¿Qué decir de estos mantecados? me enamoré de la receta en cuanto la leí, pero me enamoré aun más cuando los probé. Y eso que se han resistido.....los he tenido que hacer por fases por la falta de tiempo. El primer día trituré las avellanas y sequé las harinas, y así se quedaron durante 3 días. La fase siguiente fué amasar los ingredientes y guardar en la nevera la masa, y ahí se quedó otros 2 días..... Y por fin, el día que los horneé, disfruté como una enana.....qué olor había en la cocina, tanto que no me pude aguantar a que se enfriaran por completo para probarlos.
Esta magnífica receta la encontré en el blog Hojas de Ishtar
Esa receta la repetiré muchas veces, porque nos ha encantado a todos.
 
Ingredientes:
-275 gr. de harina de fuerza
-75 gr. de harina de avellanas
-2 cucharaditas de café instantáneo (un sobrecillo)
-175 gr. de manteca de cerdo a temperatura ambiente
-180 gr. de azúcar glass
-Ralladura de 2 mandarinas
-1 cucharada de licor de avellanas o naranja, al gusto (yo le puse Tía María)
-1 cucharadita de canela molida
-1 huevo
-Ajonjolí


Preparación:
Lo primero que tenemos que hacer es secar bien la harina para que los mantecados duren más y sean más firmes. Este paso es básico para el éxito de la receta. Tamizamos las dos harinas y extendemos en una bandeja de horno. Horneamos a 100ºC durante unos 50 minutos, removiendo de vez en cuando para que se seque bien y pierda por completo toda la humedad.
Pasado este tiempo, sacamos del horno y dejamos enfriar por completo.
Amasamos la harina con el azúcar, la ralladura de mandarina, el licor, la canela, el café y la manteca. Cuando tengamos una masa homogénea, hacemos un rollo con ella y la envolvemos en film transparente y la metemos en la nevera un par de horas (o como yo, un par de días) para que adquiera consistencia y podamos trabajar con ella.
Extendemos la masa sobre la superficie de trabajo dejándola de un grosor de 1 y 1/2 o 2 centímetros, cortamos con un corta pastas o, si no tenemos, con el borde de un vaso pequeño y los vamos poniendo con cuidado en una bandeja de horno forrada de papel de hornear.

Barnizamos delicadamente con huevo batido y espolvoreamos de ajonjolí. Horneamos a 180ºC durante unos 25 o 30 minutos, según hornos.
Dejar enfriar completamente antes de mover a otra bandeja porque calientes son extraordinariamente frágiles.